Recorres el camino del bosque, pero un río desbordado te corta el paso.
La arboleda te oculta toda visión del camino y no sabes como volver.
En la lejania se escucha un eco siniestro acompañado de una sensación que te pone los vellos de punta.
Ya no hay vuelta atrás.
Intentar cruzar el río
Escalas un arbol
Intentas echar abajo un arbol